Maquinarias

16/02/2019

El clima no permitió igualar a zafras anteriores

La zafra sojera 2018-2019 de Agropeco sufrió los efectos negativos del clima, tal como ocurrió en todas las zonas de producción del país, lo cual repercutió negativamente en los rendimientos. No obstante la firma espera alcanzar un promedio de rendimiento general de entre 3.000 y 3.200 kilogramos por hectárea.

La zafra de soja 2018-2019 no tuvo el acompañamiento favorable del clima de las dos anteriores campañas. Igualmente, la empresa Agropeco logró rendimientos de 2.500 a 3.000 kilógramos por hectárea de las áreas sembradas en forma temprana; y de 3.000 a 3.700 kilógramos por hectáreas, de las superficies cultivadas en forma tardía.

El Ing. Agr. Luis Marecos, responsable del área agrícola de Agropeco, señaló que los rendimientos oscilan de acuerdo a los chaparrones que alcanzaron o no a una parcela. “Se tuvo pocas lluvias generalizadas sobre toda la finca en esta campaña”, añadió.

Los promedios logrados a la fecha, en que cosechó una superficie de 1.500 hectáreas, fue de 3.000 kilogramos por hectárea, de producto seco. El técnico estimó un promedio general que oscilará entre 3.000 y 3.200 kilogramos por hectárea. “Dependerá exclusivamente de las lluvias que puedan llegar para las siembras más tardías”.

Marecos mencionó la gran cantidad de lluvias caídas en setiembre, lo que dificultó la cosecha de trigo y canola, y retrasó la siembra de soja. Posteriormente, la falta de precipitaciones coincidió con la etapa de llenado de granos de los primeros lotes tempraneros. Esto ocasionó un quiebre del potencial de rendimiento, lo que finalmente produjo mermas de hasta el 40%. También señaló la alta presión de roya, orugas y chinches que afectó la zafra 2018-2019 de Agropeco.

Para la campaña sojera 2018-2019, la empresa empleó las siguientes variedades: BMX Valente RR (6968 RSF), BMX Brava RR (6663 RSF), NA 5909 RG, DM 6.2i STS RR, NS 6009 IPRO, M 6211 IPRO, y M 5947 IPRO.

Esta empresa destinó 5.000 hectáreas para el cultivo de soja en campaña 2018-2019 y realizó la siembra en tres etapas. Las buenas prácticas agrícolas realizada por la empresa, como sistema de siembra directa y la rotación de cultivos, evitó que la pérdida de rendimiento sea mayor en la finca.

Para la zafriña 2019, la firma pretende destinar unas 500 hectáreas al cultivo de soja, con el objetivo de producir semillas para la próxima campaña. También se sembraran 800 hectáreas de maíz, 600 hectáreas para la producción comercial de granos y 200 hectáreas para ensilaje de planta entera.