Remarcó que es una buena opción para los productores paraguayos, siempre y cuando los precios permitan una diferencia para cubrir los trámites de logística, entre otros. “Es una posibilidad buena. El Brasil es un gigante y su consumo igual. El problema es puntual en la zona de Mato Grosso, ciudad vecina con nuestra frontera, lo que permite realizar esta operación. A nivel local, esta acción puede abrir una nueva puerta a los productores ya que últimamente los precios que estaban recibiendo estaban bajando ante los precios de exportación”, destacó.
De avanzar las negociaciones, indicó que se debería realizar un acuerdo entre cancillerías para ratificar la homologación de los acuerdos sanitarios y luego las partes privadas iniciarían las negociaciones para los envíos. “Podría ser de inmediato porque la necesidad del Brasil es ahora, siempre que los precios lo permitan ya que hay una diferencia, teniendo en cuenta que nuestro ganado es más barato que el brasileño”, sostuvo.
Mencionó que el hato ganadero del país representa unos 14 millones de cabezas. “Estamos produciendo alrededor de 2.500.000 terneros en el año y eso indica que se puede faenar esa misma cantidad sin que afecte el stock”, dijo.
El portal “Correio Do Estado” señala que la falta de ganado para faena en la zona de Mato Grosso do Sul hizo que se busque la importación de animales desde el Paraguay. La falta de disponibilidad de ganado para el sacrificio en Mato Grosso do Sul ya se puede sentir con el cierre de algunas plantas de carne, refiere el medio brasileño. Según representantes del sector, esta fue la principal motivación para que solicitaran autorización al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento (MAPA) para importar animales de Paraguay. “El pedido fue enviado por la Unión de Industrias de Frío, Carnes y Derivados de Mato Grosso do Sul (Sicadems) esta semana”, sostiene el portal de noticias.
Señala que, según el vicepresidente del sindicato, Régis Luís Comarella, algunos mataderos tienen su producción paralizada por falta de materias primas. “Se solicitó, a través de Sicadems, que pudiéramos sacrificar [animales importados] debido a la inactividad de las plantas. Y el buey en Paraguay también tiene un precio muy por debajo del nuestro. El ganadero se resiste y quiere [comercializarlo] a R$ 300”, dijo. Según datos de Scot Consultoría, la “arroba do boi” se vende en US$ 45,75 en Paraguay, unos R$ 244,76. En Mato Grosso do Sul, la arroba se cotiza actualmente a R$ 280,50, según la consultora.
Fuente y fotografia: La Nación.