Notas

30/12/2019

Temporada mixta: Caña Dulce, Azúcar y Alcohol

CAÑA DULCE, AZÚCAR Y ALCOHOL

La temporada cañicultura cerro la zafra en mixto, incluso favorecido finalmente por el clima para una cosecha continua, tras unos golpes de heladas fuertes al inicio de las labores. En tanto, el sector alcoholero igualmente mantuvo cierta dinámica, sobre todo por el desempeño del mercado, en especial el local. Johan Heinrichs, director presidente de la firma Alcotec, brindó algunas informaciones y compartió algunos comentarios desde su óptica para con el ámbito de la producción primaria y su industrialización.

El entrevistado abordó primeramente la cuestión agrícola. Indicó en materia de cosecha, que arrancó “relativamente bien”, aunque con índices que tendieron a revelar no muy altos rendimientos. De igual forma, en un primer momento, se presentaron heladas muy fuertes, en especial, en los primeros meses de la cosecha, lo que arrojó como resultado que mucha caña dulce “se quemó”, indicó Heinrichs.

Agregó que esta situación contribuyó a bajar los rindes tanto a nivel de producción primaria como secundaria. “Tuvimos bajón de rendimiento en el campo e industrial también. Nosotros empezamos la cosecha este año los primeros días de junio, cuando lo normal se da en mayo. Sin embargo, por alguna ampliación empezamos el primero de junio”, comentó.

También varió el desempeño en el campo. La empresa participa con un 40% de cultivos propios y el 60% restante de la materia prima la compra de pequeños productores. En el caso de la firma, se implementa la mecanización. La productividad promedió 80 toneladas por hectárea. Entre las máximas, hubo excepciones de parcelas que superaron las 100 toneladas por hectárea, dependiendo de la fertilidad del suelo.

Mientras, el rendimiento agrícola de los pequeños productores ronda en la franja entre 40 y 60 toneladas por hectárea. “Mucha gente vive de la caña en la zona de influencia y alrededores. Los cultivos mecanizados normalmente tienen mejor rendimiento por los tratamientos que se dan a las parcelas y con los pequeños productores normalmente son entre 40 y 60 toneladas por hectárea”, recalcó.

Si bien es cierto, el factor climático es muy importante para el rendimiento de la caña dulce, cabe recordar que desde el siglo pasado se viene manteniendo este rinde agrícola en las fincas cañicultoras, especial de los pequeños agricultores, lo que debería ser un llamado de atención a las autoridades y a los referentes del sector para ver cómo se puede mejorar o elevar los niveles en las fincas de los pequeños agricultores.

Con respecto a la producción de la última zafra se dio una merma de 10% con relación a la zafra del 2018 por motivo de bajos rendimientos como industrial y en el campo.

También dijo Heinrichs que a pesar del bajo rendimiento la caña dulce fue el rubro con mejor precio para los pequeños agricultores. “Como estamos hace casi 12 años, permitió que se plante más, aunque no salimos a financiar ni dimos asistencia técnica en los últimos años. No obstante, creció el área de caña dulce en los últimos años en la zona de influencia. Esta tendencia también la tuvimos, pues crecimos en estas temporadas recientes. Cada año sembramos más porque existen rotaciones naturales por las parcelas que se deben renovar”, acotó.

En general, reiteró, la campaña cierra bastante bien. “La sequía que vino representó un beneficio para la cosecha de la caña dulce. Ciertamente generó desperdicios y perjuicios para otros rubros del sector agrícola como soja, maíz o trigo. Pero en nuestro caso, incluso la caña dulce quemada por la helada igual se pudo cosechar. El pago ronda 180.000 guaraníes la tonelada más IVA. Esperamos cerrar una buena zafra”, expresó.

En la industria

Con respecto a la parte manufacturera, en el caso de Alcotec, recordó que la Empresa fue fundada en el año 2007. “Empezó con alcohol y desde hace 6 años se incorporó la producción azucarera. Venimos produciendo alcohol de caña, de cereal y azúcar y procesamos entre 240 y 250 mil toneladas de caña dulce, en una zafra que se inicia en mayo y culmina en diciembre”, explicó.

Recordó que para el caso del alcohol, la firma produce unos 13 millones de litros por año, mientras que en azúcar, el volumen obtenido en temporada es de 20 mil toneladas por año. Opera totalmente para el consumidor local. “Producimos azúcar blanca y el alcohol para el mercado doméstico. Todo es colocado, a pesar de la competencia del contrabando o la sobreproducción de alcohol”, manifestó.

La industria trabaja a capacidad plena, mientras haya materia prima, reconoció. “Esta empresa está en un 60% con pequeños productores de la región y de las regiones más aledañas. Tenemos más de 400 pequeños productores quienes nos proveen su caña de azúcar todos los años. El resto está siendo proveído por producción propia. En la parte alcoholera, se tiene un tipo de mezcla ideal de 25% a las naftas en general”, dijo.

En ese sentido, reconoció que existe exceso de productos, por lo que colocan en varios emblemas. “La alcoholera trabaja todo el año, la azucarera trabaja 8 meses al año. En planta hay 100 empleos directamente y 20 en el campo. En forma directa a indirecta fácilmente hay 4.000 personas involucradas. Nuestro objetivo es dar trabajo y progreso a los pequeños productores”, subrayó.

Reflexionó que la industria siempre tiene algún cuello de botella. “Uno siempre enfrenta esa situación y busca aumentar la capacidad hasta donde pueda. Al principio hay grades proyectos, pero siempre se busca mejorar la calidad, ampliar un poco la producción y mejorar las cosas. Uno busca mejoría en el proceso para poder ofrecer productos de mejor calidad, con certificación, etc.”, concluyó.