Durante su intervención, el Ing. Agr. Daniel Ryjluk, asesor comercial de Agrofértil, compartió el comportamiento de las variedades de soja, que enfrentaron ciertos desafíos debido a la escasez de precipitaciones. Esto aceleró el ciclo de maduración y anticipó el periodo de cosecha. “Con solo 106 días, el cultivo está listo para cosecha, a pesar de que se sembró en septiembre, como se recomienda para todas las variedades. La falta de lluvias iniciales, la baja luminosidad y la escasez de precipitaciones hacia el final de la campaña contribuyeron a una maduración acelerada en todos los materiales”, explicó Ryjluk.
En el Día de Campo de Volendam, Agrofértil presentó dos destacadas variedades de soja Neogen: Neo 580 IPRO (110 días a cosecha), con un grupo de maduración 5.8, que sobresale por su ciclo precoz, alto potencial de rendimiento y resistencia a la Phytophthora; y Neo 610 IPRO (125 días a cosecha), con un grupo de maduración 6.1, que ofrece una excelente ramificación y resistencia a enfermedades.
El rendimiento de las parcelas se vio afectado por la distribución irregular de las lluvias, que solo alcanzaron los 300 mm durante la zafra. Ante este escenario, Ryjluk sugirió a los productores considerar los híbridos de maíz de Agroeste para la zafriña, ya que las condiciones actuales no son las más favorables para el cultivo de soja.
"Después de cuatro años de dificultades climáticas y los precios bajos de las commodities, es esencial adaptarse y explorar alternativas. La resiliencia es fundamental para enfrentar estos desafíos", concluyó Ryjluk, instando a los productores a tomar decisiones informadas y estratégicas con el acompañamiento de profesionales del sector.
Este evento reafirma el compromiso de Agrofértil de seguir ofreciendo soluciones innovadoras y el respaldo necesario para que los productores puedan tomar las mejores decisiones en un entorno agrícola desafiante.
