José Francisco Díaz Nájera
Luis Antonio Terán Astudillo
Dr. Sergio Ayvar Serna
Colegio Superior Agropecuario del Estado de Guerrero (CSAGERO)
E-mail: apigro1988@hotmail.com
Una composta consiste en la degradación de residuos orgánicos bajo efecto de acción microbiana en condiciones aerobias, donde estos son mezclados con materiales como estiércol animal para facilitar el proceso de degradación y la obtención del abono. En el cuadro 1 se muestra el equipo necesario para la elaboración de la composta. Primeramente, se debe escoger el sitio donde se establecerá, posteriormente, se procederá a condicionar el lugar. El tamaño de la composta está en función de la cantidad de residuos a utilizar y cantidad de estiércol. El material empleado puede ser desperdicio de frutos (jitomate, cebolla, lechuga, mango, naranja, entre otros residuos verdes y estiércol vacuno; la proporción de material fue 2:1. Se recomienda utilizar el doble de residuo vegetal por 1 de estiércol. Para dar inicio se coloca el cubrebocas para evitar el contacto con las bacterias que posee el excremento, luego se deposita el desperdicio vedación por parte de los microrganismos, se le adiciona levadura de pan; se colocan 250 g de levadura dentro de un recipiente de 20 L con agua, después se disuelve, y al final, se le incorpora a la composta (Figura 3). Finalmente, se cubre con una cubierta plástica para conservar la humedad (Figura 4).
Luis Antonio Terán Astudillo, Consultor Agrícola Independiente.
El proceso de fermentación se caracteriza por un incremento de temperatura que puede llegar hasta los 50-70°C, que propicia la degradación y desinfección del sustrato. La composta debe revolverse periódicamente (2 veces/día), ya que la fermentación es un proceso aeróbico y se debe incorporar agua para mantener la humedad requerida. Bajo estas condiciones de manejo, la composta estará lista en aproximadamente 30 días, cuando la temperatura se estabilice y se mantenga igual a la ambiental. En la figura 5, se muestra el proceso de degradación que sufrió la composta en las primeras semanas. En la imagen A se muestra todo el material ocupado (hojas, frutos, estiércol), se tomó el mismo día que se elaboró. En la imagen B, se tomó a la semana 2 y se observa que gran parte del material vegetativo se degradó. En la imagen C, el material aún no termina su degradación, sin embargo, es notorio el cambio con respecto a la imagen B. La imagen D, se tomó en la 4° semana y se notó que la materia que se incorporó esta degradada, sin embargo, se encuentran terrones que aún continúan en descomposición. A pesar de esto, se puede cribar para separar esos terrones y utilizar el resto de materia orgánica y los terrones utilizarlos en la próxima composta a realizar.
La obtención de este material composteado puede ser utilizado a gran escala para incorporar en suelos agrícolas deficientes en materia orgánica lo cual permite mejorar las características físicas y químicas del suelo. Adicionalmente se puede utilizar en la implementación de huertos urbanos y/o en la propagación de plantas ornamentales.
Sergio Ayvar Serna,
Profesor-investigador.