Notas Técnicas

09/06/2022

Importancia de la Inoculación en el proceso de ensilado

Juan Ignacio Herrera, Jefe de Productos de Rizobacter Argentina para Granos Almacenados e Inoculantes para Ensilado, brindó una serie de charlas en Paraguay sobre la importancia de la inoculación en el proceso de ensilado como aliado clave en la conservación de Maíz, para su producto LactoSilo Gold y dejó estas recomendaciones.

El ensilado es un ecosistema creado para la conservación de distintos materiales como maíz, sorgo y pasturas para la suplementación animal mediante el picado, acarreo y compactado del material en silos puentes o silos bolsa.
La finalidad del ensilado es eliminar la actividad de hongos y levaduras que descompongan o deterioren la calidad del forraje, esto es por lo que en primera instancia se recurre a la compactación para eliminar el oxígeno presente y en segunda instancia las bacterias lácticas que se encuentran en el forraje empiezan a actuar generando un descenso del PH en el ensilado mediante una fermentación anaeróbica lo que termina por inactivar a los microorganismos indeseados.
Para que un proceso de ensilado sea exitoso debemos comenzar por el momento óptimo del corte, donde en el caso de maíz se considera cuando el mismo se encuentra con un porcentaje de materia seca cercano al 35%, sumado a un llenado de grano entre ¼ y ½ línea de leche. Estos parámetros son en los que mayor aprovechamiento podemos sacarle al cultivo no solo nutricionalmente, sino para el proceso de ensilado ya que los azucares que posee en ese estadio ayudan a hacer más eficiente el proceso de acidificación. Una vez determinado el momento del corte debemos asegurarnos de que durante la cosecha de este se realice un buen tamañado del material, ya que esto influirá directamente en el proceso de compactación y acidificación del ensilado. En el picado los parámetros a lograr son que entre el 40 y 50 % de las partículas tengan un tamaño entre 0,8 a 2 cm, entre un 5 a 10% tengan un tamaño mayor a 2 cm y el resto de las partículas – 0,8 cm.
El siguiente paso es el acarreado y el compactado del maíz picado el cual debe ser lo más rápido posible para eliminar cuanto antes la presencia de oxígeno del material induciendo la anaerobiosis lo antes posible. Ahí es donde la compactación del material juega un papel clave, ya que mientras más compactado se encuentre el material menor es la presencia de oxígeno y menores son las pérdidas. Lo deseable es contar con una compactación que ronde entre los 230 a 250 kg de Materia Seca por m3. Una vez realizado el compactado pasamos al proceso de tapado de este donde ocurre el tan llamado proceso de estabilización del ensilado, para luego disponer del material para nutrición animal.


En el caso que logremos todos estos parámetros, la estabilización del silo para su apertura es de mínimo 21 días, donde si bien el ensilado logra la finalidad de conservar el maíz picado el proceso no es del todo eficiente ya que durante las 3 semanas que demora estabilizarse, los microorganismos presentes consumen azucares esenciales y deterioran parte el material. Hoy en día existe una forma 100% biológica de mejorar este proceso y simple de aplicar como lo es el agregado de inoculantes, ya que este es un aditivo de bacterias ácido-lácticas (bacterias homofermentativas) en alta concentración, que rápidamente se propagan por el ensilado generando una gran cantidad de ácido láctico que logran realizar un descenso drástico del PH a un nivel de entre 3,8 a 4,2 en tan solo 48 hs lo que reduce un proceso de 21 a 2 días conservando mejor la cantidad y calidad del forraje, reduciendo las pérdidas durante el proceso del ensilado en un 5% .
La aplicación de inoculantes hoy en día está muy tecnificada ya que casi todas las cosechadoras o picadoras autopropulsadas cuentan con un tanque inoculador que permite aplicar el producto durante el mismo proceso de picado, llegando al proceso de compactado ya inoculado. Esto hace mucho más eficiente la aplicación comparada con el viejo método de asperjar el producto con mochilas durante el proceso de compactado ya que nos aseguramos de que el producto quede distribuido por todo el material.


Ahora, cualquier inoculante del mercado tiene como finalidad acidificar lo antes posible, pero aún así no es del todo eficiente. Una vez abierto el ensilado para suministrarlo a los animales, el material que queda expuesto empieza a sufrir el efecto del oxígeno que rompe la anaerobiosis y no solo empieza a deteriora el material, sino que también a la calentarlo, lo que convierte al forraje mucho menos palatable para el animal. Según estudios muestran que una vez abierto el silo las perdidas por efecto del oxígeno rondan un 5%.
Hoy en día existen inoculantes que no solo poseen baterías para descender el Ph, sino que algunos además poseen una bacteria hetero fermentativa llamada Lactobacillus Buchneri, la cual se encarga de mantener al material estable una vez abierto el ensilado. Estos inoculantes se conocen como Inoculantes Doble Propósito
El uso de L. Buchneri retarda la ruptura de la estabilidad anaeróbica, no solo evitando que los microorganismos indeseados como hongos y levaduras empiecen a deteriorar el forraje, sino que también conserva la temperatura del material expuesto durante más tiempo asegurando la palatabilidad para que el animal lo consuma y no lo desperdicie por estar caliente.

Proceso de Ensilado sin inocular vs inoculado con Inoculantes Doble Propósito

El proceso de ensilado engloba muchas pérdidas naturales en el proceso como lo es la cosecha, acarreo y compactación, pero como podemos ver con el uso de inoculantes podemos reducir en un 10% las perdidas del proceso haciendo más eficiente el periodo de fermentación y de extracción del mismo con inoculantes doble propósito
Es por esto que los inoculante nos actúan como un seguro para que el proceso de Ensilado se desarrolle correctamente, sino que los inoculantes para ensilados son reductores de pérdidas optimizando un proceso ineficiente como el ensilado natural.

Los inoculantes han avanzado en busca de optimizar el ensilado y hoy en día nos encontramos con una nueva generación de inoculantes los Complejos Lacto enzimáticos o inoculantes combinados estos además de estar compuestos por bacterias homo y hetero fermentativas tienen el agregado de enzimas celulíticas.
Las enzimas se encargan de romper las estructuras de las paredes celulares del forraje causando en primera medida un mejor ataque de las bacterias lácticas y a su vez una mayor disponibilidad de los azucares en el rumen del animal. Esto significa una menor permanencia del material en el rumen del animal, más ciclos de rumen y por consiguiente mayor nutrición del animal.

El uso de complejo lacto enzimáticos en una misma dieta de ensilado puede lograr aumento de un 18% en la producción de Carnes y un 12% de aumento en la producción de leche.

Es por todos estos argumentos que recomendamos la inoculación en ensilados de maíz y sorgo con complejos lacto enzimáticos como Lactosilo Gold, ya que no solo nos permite reducir un 10% las perdidas del material ensilado que se convierte en un mayor rendimiento de la materia seca y una mayor disponibilidad de material para alimentar a los animales, sino que también nos permite tener un mejor aprovechamiento en el rumen del animal permitiendo un aumento en la producción de carne y de leche utilizando la misma cantidad de ensilado en la dieta.