La compañía reunió a sus equipos de Paraguay y Brasil para intercambiar conocimientos y experiencias sobre la línea de fertilizantes Microstar, y profundizar las estrategias técnicas del desarrollo del producto. El encuentro se llevó a cabo el pasado 16 de julio en la oficina de Agronómico, firma aliada de Rizobacter en el desarrollo de ésta y otras tecnologías.
El encuentro reunió a los equipos, técnico y de venta de Rizobacter Brasil y Paraguay. La compañía de origen argentino mantiene un cercano relacionamiento con la firma Agronómico, y más específicamente con el investigador André Zabini, con quien trabajan desde el 2015 en el desarrollo de productos fertilizantes.
Thaciana Reis, responsable de productos fertilizantes de Rizobacter Brasil, explicó que el objetivo de la capacitación fue profundizar las técnicas y reunir los conocimientos, para trabajar de forma conjunta en Sudamérica en el desarrollo del producto Microstar, como se lo conoce en Paraguay y Argentina; o Rizostar, que es la denominación que tiene esta línea fertilizante en Brasil.
Esta reunión fue aprovechada para intercambiar datos sobre los avances que tienen con el producto Microstar en Paraguay y Brasil. Reis mencionó que la proximidad de ambos países, la similitud que existe entre los suelos y las recomendaciones, se prestan perfectamente para un trabajo conjunto en el desarrollo de esta tecnología.
La responsable de productos fertilizantes de Rizobacter Brasil señaló la necesidad de cambiar el concepto que tienen los productores sobre la fertilización. “La mayoría de los conceptos, en Brasil, vienen de hace tiempo. Así que tenemos un gran trabajo para demostrarles que producir va más allá que estar por encima del suelo. A lo que debemos prestar atención está un montón más abajo del suelo. Y ese es el desafío de todos nosotros, que estamos al frente del producto Microstar”.
Fernando Sánchez, jefe de producto de la línea fertilizante de Rizobacter, comentó que la firma Agronómico es un aliado que tienen para el desarrollo de Microstar y otras tecnologías en Paraguay. Señaló que trabajan conjuntamente desde hace cuatro años, con muy buenos resultados. “Es una alianza con la que nos sentimos cómodos, y creo que seguirá creciendo año tras año”.
La capacitación, que tuvo una duración de dos días, fue de un enfoque netamente técnico. Durante la primera jornada se conversó, principalmente, sobre el suelo. El investigador André Zabini, director técnico de la firma Agronómico y director de investigación en Agros, habló sobre las principales clases de suelos, sus propiedades físicas, la materia orgánica, las reacciones, la acidez, entre otros aspectos. También orientó sobre la interpretación del análisis del suelo y las recomendaciones de fertilización, el potencial productivo sobre los diferentes ambientes de producción, y presentó los resultados de la investigación con el producto Microstar (Rizostar) en Paraguay.
Durante el segundo día de capacitación compartieron resultados que ofrece el Microstar en Brasil, Paraguay, y algunos datos de Argentina. El objetivo es establecer un trabajo conjunto y una estrategia más avanzada para el posicionamiento del producto.
Aporte nutricional eficiente
La presentación de André Zabini se centró en capacitar sobre la interpretación de los diferentes ambientes de producción. Es decir, sobre la necesidad de entender las potencialidades y limitaciones de los suelos, como base para realizar una correcta recomendación de uso de fertilizantes.
Desde el nacimiento de la firma, en el año 2015, Agronómico realiza ensayos con el fertilizante Microstar y otras tecnologías líquidas de Rizobacter, como bioestimulantes e inoculantes. Estas pruebas se llevan a cabo en diversas situaciones de climas y suelos de Paraguay, comentó.
En relación a los resultados, señaló que pudieron observar que el Microstar tiene una eficiencia similar y en algunos casos superior a la fertilización convencional. Sin embargo, las dosis del producto de Rizobacter son bastantes inferiores a lo que usualmente se tiene acostumbrado aplicar con un abono común. “Con esto llegamos a la conclusión de que es un aporte de nutrientes mucho más eficiente”.
Los ensayos desarrollados por Agronómico también permitieron comprobar que los inoculantes de Rizobacter, en combinación con el fertilizante Microstar, potencia el efecto de la tecnología en algunos casos, tanto en cultivos de soja como en maíz.
Explicó que los trabajos que realizan se basan en ensayos de dosis y respuesta. Es decir, se aplica diferentes cantidades del producto a evaluar y se mide la reacción en las plantas. Se tiene como parámetros el vigor, el crecimiento, la producción, entre otros. “Siempre teniendo como comparación a los abonos convencionales del mercado, en las mismas condiciones y dosis”.
Zabini explicó que Agronómico enfoca su trabajo en las investigaciones de las características físicas, químicas y biológicas de las parcelas productivas, en Paraguay y en parte del estado de Paraná (Brasil). La firma realiza el seguimiento de los campos, mediante el monitoreo constante y la evaluación de efectividad de las propuestas técnicas que ofrece.
Fertilizante microgranulado
El producto Microstar es una mezcla química microgranulada que permite el uso del fertilizante en la siembra, conjuntamente con la semilla, sintetizó Fernando Sánchez. La tecnología no genera fitotoxicidad, además de proveer todos los nutrientes en forma rápida y efectiva. De esta forma, las plantas tienen la posibilidad de crecer en forma vigorosa y homogénea desde los primeros estadios, añadió.
Las primeras pruebas de adaptación de la tecnología iniciaron en Argentina, en el2012. Tras dos años de ensayos por todo el territorio argentino, Rizobacter lanzó comercialmente el producto. La compañía, incluso, conjuntamente con su socia De Sangosse, invirtió en la construcción de una fábrica del fertilizante para atender al mercado Latinoamericano.
Sánchez señaló que la tecnología ganó bastante terreno en Argentina, especialmente en los últimos años. “Viene creciendo año tras año, ya que los productores que pudieron probar la tecnología la han adaptado a sus planteos nutricionales, en algunos casos reemplazando totalmente los commodities de base, y en otros casos en una estrategia conjunta”.
La misma dinámica es también observada en los países limítrofes, donde aquellos productores que desafiaron sus estrategias de nutrición, encuentran en Microstar una herramienta muy válida para mejorar la productividad de sus planteos. Esta optimización se puede observar desde el arranque del cultivo, con un crecimiento diferencial, que posteriormente se traduce en más y mejores rendimientos, señaló.
Si bien la incorporación de esta tecnología presenta una dinámica positiva en los países en los que está presente, Rizobacter continúa con las investigaciones y ensayos con el objetivo de encontrar nuevos usos para el producto. La compañía incluso analiza nuevas estrategias nutricionales, en las que pueda combinar el empleo del Microstar con ciertos commodities y proponer la nutrición balanceada que requieran los cultivos.
El uso de Microstar en Paraguay se enfoca a cultivos de soja, maíz, avena, trigo. La tecnología también fue probada en parcelas de canola, se comenzó a posicionar para plantaciones de caña de azúcar, e igualmente ofrece muy buenos resultados en arrozales. “Nuestros representantes técnicos de venta y nuestro servicio técnico están desarrollando el producto en cada uno de los cultivos representativos, para poder llegar a más productores”.
Buena aceptación
La Ing. Agr. Ruth Caballero, del departamento de asistencia técnica y marketing de Rizobacter Paraguay, señaló que el Microstar es un fertilizante diferente a los demás commodities, ya que la dosis recomendada es 30 a 40 kilogramos por hectárea.Se distribuye con la semilla. De esta forma, el producto está directamente disponible y al emerger la radícula los nutrientes otorgan un arranque inicial uniforme al cultivo. La tecnología, sin embargo, requiere un cambio de concepto, por lo que la firma centra sus esfuerzos en mostrar sus beneficios a los productores dentro del cultivo.