Un grupo de labriegos que representa a pequeños yerbateros del noreste de Itapúa llegó ayer a nuestra capital para buscar solución al bajo precio de la materia prima y pidieron al MAG apoyo para procesarla y tener más ingresos.
La yerba mate es uno de los pocos rubros de renta que queda en la pequeña finca campesina en el noreste de Itapúa, y actualmente el bajo precio de la materia prima desalienta a los productores, porque reciben tan solo entre G. 500 y G. 800 por kilogramo de hoja, señaló ayer el presidente de una asociación de pequeños yerbateros de Itapúa Poty, Emiliano Vera.
El mismo llegó ayer a la capital del país con un grupo de 50 productores para solicitar apoyo del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), con el objetivo de terminar un secadero de hojas, que falta en un 20%, y con ello dar un proceso inicial a la yerba mate.
Explicó que de esa forma podrán obtener mayores ingresos vendiendo la yerba mate canchada, que implica un valor agregado.
Mencionó que este tiene un precio mayor de G. 6.000 a G. 7.000 por kilogramo. Comentó que la Cooperativa Colonias Unidas paga a sus socios un buen precio de G. 1.800 a G. 1.900 por kilogramo de hoja, y algunas empresas también abonan esa cifra, pero que a los pequeños labriegos, los intermediarios, que poseen secaderos, les ofrece un precio mucho menor, y algunas veces ni siquiera quieren recibirles la cosecha.
Regularizar asentamiento
Por otra parte, Celina Benítez, representante del asentamiento Taguató, de Itapúa Poty, que también integró el grupo de productores yerbateros que llegó hasta el local del MAG, expresó que necesitan regularizar la tenencia de la tierra. “Estamos en unas 9.000 hectáreas que fueron expropiadas hace 20 años, pero que nunca se pagó al dueño y ahora pertenece al BNF”, apuntó.
Tanto Celina Benítez como Emiliano Vera dijeron que el ministro de Agricultura, Rodolfo Friedmann, les prometió visitar la zona para conocer la situación y buscar soluciones.
Fuente: ABC Color.